Una de las paradas obligadas es la exposición de la libanesa Mona Hatoum en la Fundación Querini-Stampa. Otra propuesta también está en el Palacio Fortuny, para empaparse de 'In-Finitum', una propuesta de Axel Vervoordt que establece un diálogo entre una escultura egipcia creada hace 5.000 años con un móvil de Calder, entre un retrato de Picasso y un vídeo de Bill Viola.
No osbtante, el punto de fricción está en la Dogana, donde el coleccionista François Pinault inauguró su nuevo museo de arte contemporáneo. La escultura situada en la Punta de la Dogana, aspira a convertirse en un símbolo contemporáneo de la Serenísima. (Fuente: http://www.cope.es/cultura/23-06-09--una-ruta-por-arte-venecia-62288-1)